Cuando las cosas empiezan a construirse, a mucha gente le entran las prisas. pero nadie puede discutir que esta cuadrilla cada día es menos de "hermanos abonados" y más de hermanos cargadores.
Con ese objetivo, junto al intrínseco de llevar con dignidad a María Santísima de los Desamparados por las calles de Cádiz, nació este nuevo proyecto.
El reto no era fácil, el listón estaba muy alto y, la comparación constante a la que solemos jugar en este mundillo no le iba a suponer ningún favor. Esas comparaciones siguen existiendo pero en el sentido equivocado. La realidad es que la cuadrilla de la Virgen empieza a tener sensación de grupo de verdad dentro de la cofradía y cada vez mayor número de sus componentes se están llenando del sentimiento de que El Caído es su hermandad.
Si a eso le añadimos que en la calle cumplen como los que más, trabajan a destajo y se comprometen al máximo con el resto de hermanos, sólo se les puede decir, gracias, seguid en el camino, que aun os queda, pero vais a buen ritmo y que los obstáculos y zancadillas no os hagan caer.
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